El Ayuntamiento de Zaragoza eliminó hace unos meses parte de un murete del Balcón de San Lázaro para permitir el paso de peatones, como le pidieron los niños del colegio Cándido Domingo. También modificó varias fases semafóricas en la Almozara, a propuesta de los alumnos del Jerónimo Zurita. Y en Parque Goya sustituyó aparcamientos de coches por otros de motos y bicis para facilitar la visibilidad en pasos de peatones. Estas intervenciones son algunos ejemplos de la más de 50 mejoras acometidas por el servicio de Movilidad, a propuesta de las familias participantes en el programa Caminos Escolares.
Experiencia piloto realizada durante el curso 2012 – 2013 en los colegios CEIP Sainz de Varanda y CEIP La Jota, de Zaragoza.
Los Caminos Escolares son rutas seguras y accesibles para que los niños puedan ir solos andando al colegio. Se trata de un proyecto impulsado por el Ayuntamiento de Zaragoza y gestionado por la asociación Ágora. Dos colegios comenzaron como iniciativa piloto a finales del curso 2012-13 (el Sainz de Varanda y la Jota). Ahora participan 13 centros de Zaragoza y unos 350 niños. Varios colegios están en lista de espera para sumarse a la iniciativa.
El proyecto de Camino Escolar tiene como objetivo promover la autonomía de los niños para que puedan ir solos al colegio y moverse por su entorno. Otro objetivo es mejorar la movilidad en los barrios y hacer una ciudad más accesible, contando con las opiniones de los centros y las familias.
«Es un proceso muy participativo. Antes de poner en marcha el camino escolar en un colegio, hacemos una encuesta a las familias para conocer qué rutas hacen y qué puntos conflictivos ven en su entorno. Después preguntamos a los que participan qué creen que se podría mejorar. Trasladamos esas propuestas a Movilidad y a las juntas de distrito, donde se debate y se decide qué actuaciones son más urgentes», explica Julia Mérida, miembro de la asociación Ágora.
¿Qué proponen los niños y sus padres? Entre las propuestas ciudadanas para mejorar la movilidad figuran eliminar barreras arquitectónicas, ampliar aceras, mejorar la visibilidad en los cruces, cambiar aparcamientos de coches, mover contenedores de sitio, aumentar el tiempo para los peatones en semáforos, cambiar la fase ámbar (que muchos coches no respetan), poner semáforos nuevos, limitar la velocidad de los vehículos en algunas calles…
El Ayuntamiento atiende estas peticiones «siempre que se puede». Algunas no tienen ningún coste (como los cambios semafóricos) y en otros casos hay que poner señales nuevas o hacer obras menores. Para eso este año se cuenta con dos partidas presupuestarias que suman unos 29.000 euros.
Las obras y mejoras aprobadas este año se llevarán a cabo en breve. En las últimas semanas, los gestores del proyecto Camino Escolar han presentado las propuestas en las juntas de distrito. Y el servicio de Movilidad está cerrando el listado de actuaciones.
by Kalooga
De Pedro denuncia el «excesivo» número de semáforos que regulan el tráfico en Zaragoza
Encuentro para refozar los Caminos Escolares de Zaragoza
Tres nuevos colegios se sumarán este curso al Camino Escolar