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Alentar, articular y sostener alianzas con tejidos comunitarios vivos.

Entrevista a @ZIOR13 y @Ricardo_AMASTE para #Qepea2018 ZIORTZA ETXABE Y RICARDO ANTÓN: “LA ADMINISTRACIÓN PÚBLICA DEBE SER CAPAZ DE ALENTAR, ARTICULAR Y SOSTENER ALIANZAS CON TEJIDOS COMUNITARIOS VIVOS” Es necesario favorecer nuevas formas de implicación ciudadana en la vida pública, hacerlo desde la planificación participada, el desarrollo corresponsable y la evaluación empática».

Lo afirman Ziortza y Ricardo, que conocen y practican las lógicas de la colaboración para diseñar y facilitar servicios, entornos y procesos de innovación en multitud de organizaciones y que entienden las ventajas, para lo institucional, de relacionarse con un tejido social vivo e inteligente. Actualmente, ambos forman parte de WikiToki Elkarsorkuntzarako Laborategia, un laboratorio de co-creación y prácticas colaborativas entre la innovación social, la acción cultural, la participación ciudadana, el desarrollo comunitario y la economía solidaria.

Son personas con experiencia en abrir caminos, les gusta experimentar y contribuirán, de seguro, a que el Congreso Q-epea sea un espacio nutritivo y energetizante. ¡Pura inteligencia colectiva en acción!

¿Qué os trae por Q-epea? ¿qué venís a compartir?

Venimos a disfrutar del programa y a hacer un taller que, en realidad, es una exploración, un experimento, un espacio para compartir inquietudes y pensar juntos/as sobre factores, ingredientes, procesos, implicaciones, corresponsabilidades… entre lo individual y lo colectivo, entre lo público y lo común.

¿Qué reto fundamental creéis que deben priorizar las administraciones públicas para estar a la altura de los cambios de todo tipo que se nos presentan?

El principal reto es repensarse como servicios públicos orientados a las personas y a la vida en común; romper radicalmente con la lógica de burocratización y privatización que está desvalorizando su función frente a la sociedad; repartir juego entre la ciudadanía activa; facilitar, abrirse y comunicarse.

Debemos plantearnos un verdadero debate sobre la relación de lo público (desde la administración) y lo público (desde lo ciudadano), entendiendo las ventajas para lo institucional de relacionarse con un tejido social vivo e inteligente, comprometido y proactivo, que en muchas ocasiones ha sabido llegar más lejos y de forma más concreta y situada que la propia administración pública en cuanto a capacidad transformadora. Una capacidad transformadora que se ejerce desde el habitar y el cuidar el propio entorno, a sus agentes y las iniciativas que ahí se generan y ayudan a sustentar la comunidad.

Por eso, desde la administración pública, no ser capaces de alentar, articular y sostener alianzas con tejidos comunitarios vivos es un gravísimo error, una irresponsabilidad. Más aún, en momentos como los que estamos viviendo, donde la prioridad debe ser proteger y ensanchar los derechos de nuestra ciudadanía en un sentido amplio y transformador.

¿Sobre qué palanca de cambio propondríais trabajar? 

Sobre personas que quieren ser una comunidad abierta. Es necesario favorecer nuevas formas de implicación ciudadana en la vida pública, hacerlo desde la planificación participada, el desarrollo corresponsable y la evaluación empática a través de procesos efectivos, eficientes y afectivos. Esto que suena como complejo, ¿puede ser sencillo y no implicar excesivo tiempo y esfuerzo?

¿Una razón para estar en Bilbao los días 24 y 25 de mayo?

Las personas que hemos visto en el programa son apasionadas, disruptivas, implicadas, problematizadoras, con chispa, con experiencia en abrir caminos, que no les da miedo experimentar, que se mueven entre los adentros y los afueras, que se atreven a jugar… Y las feromonas que desprenden seguro que hacen que se acerquen más personas de ese tipo. ¡Pura inteligencia colectiva en acción! Lo que se genere esos días solo puede ser algo sabroso, nutritivo y energetizante.