El humo que desprendía un turismo por la zona del capó ayer, cuando se encontraba estacionado en la zona de Borinbizkarra, alarmó a la ciudadanía que avisó a los bomberos hacia las doce del mediodía. La dotación accedió al vehículo por la puerta de atrás que tenía abierta, abrió el capó y se refrescó el motor.
Los bomberos observaron que seguía saliendo humo de la parte baja del vehículo y detectaron que el foco del incendio estaba en la manta que protege la zona baja del motor y tubo de escape, por lo que refrescaron los bajos y se retiró esta manta. Desde el primer momento se desconectó la batería y el vehículo, aparentemente, quedó funcional pese al incidente, que se le explicó al dueño cuando se presentó en el lugar.
Un aviso reclamó la presencia de los bomberos porque había humo en un garaje en la calle Clara Campoamor. No se encontró ningún foco ni en los camarotes ni en el garaje ni en la escalera de una comunidad, que tenía la puerta abierta, pero se tomaron lecturas de 15 ppm de monóxido de carbono, por lo que la dotación contactó con el técnico de la alarma que pone en marcha la aspiración manual.