Es importante tener en cuenta el etiquetado energético a la hora de comparar un electrodoméstico. Este indica las diferentes características del equipo, como el grado de eficiencia, el ruido o el consumo de agua.
10 consejos prácticos sobre cómo usar tus electrodomésticos de manera más eficiente, ahorrar así en tu factura de la luz y cuidar el medio ambiente. ‘Decálogo para el Consumo Inteligente de Electrodomésticos’. 1. INFÓRMATE SOBRE EL ETIQUETADO ENERGÉTICO Es importante tener en cuenta el etiquetado energético a la hora de comparar un electrodoméstico. Este indica las diferentes características del equipo, como el grado de eficiencia, el ruido o el consumo de agua. Aquellos electrodomésticos etiquetados con la letra A (clase A) consumen menos electricidad (hasta un 30% menos), suponen un mayor ahorro energético y son más respetuosos con el medio ambiente. Estos electrodomésticos tienen un coste económico más alto, aunque se consigue amortizarlos en muy poco tiempo.
2. PANTALLAS Y MONITORES MÁS EFICIENTES En cuanto a las pantallas de televisión o de ordenadores, a la hora de renovarlos es importante elegir aquellos de LED y OLED, ya que consumen mucho menos. El televisor por ejemplo consume el 12,2% de la energía doméstica y los ordenadores un 7% aproximadamente, es por ello que es recomendable apagarlos por completo mientras no se están utilizando.
3. LAVADOS RÁPIDOS Y EN FRÍO El 90% de la energía que consume una lavadora es para calentar el agua, así que una de las claves para ser más eficientes es realizar los lavados en frio. Además, si los realizamos con programas económicos y llenamos la lavadora al máximo conseguiremos ahorrar más energía.
4. AHORRA EN LA COCINA En el momento de renovar los electrodomésticos de nuestra cocina, debemos prestar especial atención a las placas. Es recomendable instalar placas de inducción, en vez de vitrocerámica y gas, ya que tienen un consumo mucho menor y son más ecológicas. Al adaptarse al recipiente, sólo suministran la energía necesaria y reducen el consumo eléctrico. Su precio es más elevado que el resto de sistemas, pero si se utiliza la cocina diariamente, se amortizan en muy poco tiempo. Por otro lado, si apagamos el fuego 5 minutos antes de finalizar la cocción, los alimentos se cocinarán con el calor residual y ahorraremos energía.
5. ILUMINACIÓN MÁS EFICIENTE Sustituye las bombillas tradicionales por otras de bajo consumo, conseguirás consumir un 80% menos y estas durarán hasta 8 veces más. Para lograr ser más eficientes en casa, limpia habitualmente las bombillas y fluorescentes, ya que cuando estos se llenan de polvo necesitan más tiempo para calentarse y por lo tanto consumen más energía. Finalmente, recuerda apagar siempre las luces cuando salgas de la habitación, con este sencillo hábito conseguirás ahorrar mucho en tu factura de la luz.
6. LOS ELECTRODOMÉSTICOS APAGADOS TAMBIÉN CONSUMEN Muchos electrodomésticos siguen consumiendo incluso estando apagados o en modo ‘stand by’, incluso consumen más energía mientras están apagados que mientras están en uso. Es por ello que es recomendable que en el momento de comprar un electrodoméstico nuevo, preguntes por aquellos que no consuman mientras están en reposo.
7. CLIMATIZACIÓN Al instalar un nuevo aparato de aire acondicionado en casa, es importante tener en cuenta la orientación de este y colocarlo preferentemente al noroeste para evitar que a este le de el sol durante el día. Si colocas el aparato en una zona con sombra su consumo será mucho menor. Además, es importante mantener limpios los filtros y controlar la temperatura evitando que ésta sea excesiva y que por tanto consuma más energía.
8. NEVERA Escoger frigoríficos etiquetados con la letra A nos ayudará mucho a ahorrar en consumo energético. Sin embargo, si nuestro frigorífico funciona perfectamente y todavía no es el momento de cambiarlo hay algunos trucos para ahorrar energía y, así, ahorrar en nuestra factura. Es recomendable evitar mantener la puerta del frigorífico abierta durante mucho tiempo, ya que así conseguimos ahorrar hasta un 5% en el consumo de energía. Con los alimentos calientes, es recomendable dejar que se enfríen antes de guardarlos en el frigorífico.
9. LLENA EL LAVAVAJILLAS Evita poner el lavavajillas si este no está lleno e intenta escoger un programa más económico, ya que así limitas el consumo de agua y esta se calienta a una temperatura moderada y el consumo es mucho menor. 10. EL DÍA A DÍA Una vez claros todos estos consejos, es importante aplicarlos en el día a día y convertirlos en una rutina para todos los miembros de la familia. Llevando a cabo estos sencillos pasos de forma regular, conseguirás ver, en muy poco tiempo, como tu factura energética y tu consumo se reducen considerablemente.